El Benfica ata al sustituto para Carreras
El club lisboeta ejecuta la opción de compra que tenía sobre Samuel Dahl. Un movimiento que puede habilitar la salida del ferrolano hacia el Madrid.
El tiempo corre camino del Mundial de Clubes y el Madrid aún tiene una tarea pendiente en el plan que diseñó para acudir reforzado a la cita de Estados Unidos. Cerrados los fichajes de Huijsen y Alexander-Arnold, para apuntalar la defensa de Xabi Alonso queda una última pieza. Una ficha identificada desde hace tiempo, pero cuyo avance se había estancado y ahora puede reavivarse. El dossier de Álvaro Carreras (22 años) tiene una nueva vía abierta para salir de la situación de stand by en la que se había congelado. El Benfica ha movido ficha al atar el fichaje de Samuel Dahl (también de 22 años), que en los últimos meses ha sido suplente del ferrolano, en un indicio de lo que puede desembocar en el desbloqueo de la situación de Carreras rumbo al Madrid.
Eso el tiempo lo dirá. Pero el Benfica mientras tanto ha maniobrado para tener una posición ventajosa en el proceso. Según adelantó este lunes el periodista Fabrizio Romano y confirmaron luego varios medios portugueses, el Benfica llegó a un acuerdo con la Roma para quedarse en propiedad con Dahl. La entidad encarnada pagará nueve millones de euros (estaban estipulados ocho, pero el club romano tenía una opción de bloqueo por la que el Benfica también ha tenido que pagar por caja) por el traspaso definitivo del lateral sueco, que llegó a Da Luz al cierre del pasado mercado de invierno cedido por la escuadra giallorossa. Dahl ha compaginado estos meses un rol de escudero del ferrolano en el lateral izquierdo o, como ha sucedido en ocasiones, compartiendo protagonismo ambos en encuentros en los que el español como tercer central, y el sueco como carrilero, en el versátil dibujo de Bruno Lage. Dahl ha acabado participando en 18 partidos, de los que ha sido titular en 11 encuentros.
Las negociaciones con la Roma para activar esa cláusula de compra han podido estar detrás del encallamiento en el que la operación de Carreras se había instalado. Un frenazo medido como estrategia para no disparar el coste de la operación que había en ciernes con la Roma. La contratación de Dahl puede facilitar la salida de Carreras, aunque la operación sigue contando con muchas aristas.
En primer lugar, el precio. En el Benfica tienen muy presente el cartel y la proyección que ha adquirido Carreras esta temporada y desde el país vecino se viene aireando que no están dispuestos a desprenderse de él por una cifra inferior a 40 o 50 millones de euros. Un hueso que el Madrid tendrá que roer. Sin olvidar el papel del Manchester United y otra cifra clave con doble filo: 18 millones de euros. La cantidad por la que los red devils pueden repescar al jugador, la misma que se embolsarían en Old Trafford si el Benfica lo vende a cualquier otro club.
Y no hay que perder de vista el Mundial de Clubes. La FIFA ha dado diez días, hasta el 10 de junio, a los 32 equipos participantes para perfilar sus plantillas y acudir con sus mejores galas al torneo en Estados Unidos. Un período extraordinario de fichajes que permitirá al Madrid luchar por el torneo con Huijsen y Alexander-Arnold en sus filas. Pero estos dos fichajes ya consumados son casos con una diferencia sustancial respecto a Carreras. Ni el central ni el lateral derecho iban a jugar el Mundial con sus clubes de origen (Bournemouth y Liverpool), por lo que su incorporación inmediata –pese al tira y afloja que el Madrid ha tenido con los reds para liberarle antes del 1 de julio, cuando acababa contrato– no planteaba mayor inconveniente. El Benfica, sin embargo, sí estará en el nuevo torneo (compite en el grupo C junto a Boca Juniors, Bayern y Auckland City). Hasta el día 10 hay partido.
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